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Gracias a su donante, Keegan recibió una segunda oportunidad

Keegan nació con una rara enfermedad hepática llamada atresia biliar, que suele diagnosticarse a las pocas semanas de nacer. Lo único que podría salvarle la vida era un trasplante de órganos.

Con la atresia biliar, no llega suficiente bilis al intestino para ayudar a digerir las grasas, una parte necesaria de la digestión. Los niños con enfermedad hepática aparecen ictéricos, con ojos y tono de piel amarillos. Su apetito y niveles de energía suelen estar disminuidos, a veces incluso demasiado enfermos para comer alimentos sólidos con el vientre hinchado.

Según su madre, Heather, cuando Keegan tenía 2 años y medio enfermó gravemente. Gracias a que otra familia dijo sí a la donación, Keegan pudo recibir el trasplante que tanto necesitaba.

Keegan antes de recibir el trasplante que le salvó la vida

Después de que la familia de Keegan recibiera la llamada, acabó pasando diecisiete días en el hospital tras el trasplante. Cuando por fin volvieron a casa, Keegan era un niño completamente distinto, lleno de energía. Sus ojos eran blancos, en lugar de amarillos, y poco a poco fue recuperando el apetito. Tres meses después, era imposible decir que Keegan había recibido un trasplante y que había estado enfermo.

Keegan disfrutando de Disney, después del trasplante

Desde que recibió el trasplante, Keegan ha conocido a la familia de su generosa donante, Andrea. Siente una conexión especial con ellos, como una segunda familia. En las conversaciones, Heather ha seguido aprendiendo más cosas sobre LifeSource y sobre cuántas personas intervienen para que se produzca un trasplante.

"Vive la vida, luego da vida. Todos tenemos la oportunidad de intentar que otro viva más cuando llegue nuestra hora".

Heather Johnson, la madre de Keegan

Al compartir la historia de su hijo, Heather escucha ideas erróneas sobre la edad y la imposibilidad de ser donante. Su mensaje para los demás: No te autoexijas. No tienes que tener una determinada edad, no padecer una determinada enfermedad, etc. Cualquiera puede inscribirse para ser donante.