Navegar por el duelo durante las fiestas
Imaginar las vacaciones tras la pérdida de un ser querido puede ser todo un reto. Aunque es cierto que nunca serán exactamente iguales, hay algunas recomendaciones para hacerlas más llevaderas y ayudarle a crecer en su viaje de curación.
Cuando se ha perdido a un ser querido, puede parecer que el mundo carece de sus cualidades festivas, especialmente en torno a las vacaciones. La soledad que siente una persona a menudo puede aislarla más de lo habitual. Aunque no existe un enfoque único para afrontar el duelo durante este periodo, hay algunas herramientas que pueden ayudar.
Externalizar la pérdida
¿Qué significa esto? Establezca un momento y un lugar para reconocer y recordar a su ser querido. Puede ser encendiendo una vela en su honor, haciendo que amigos y familiares compartan una historia sobre él, haciendo una donación en su honor o incluso creando un homenaje en Internet o en su casa. Sea lo que sea lo que elijas hacer, por grande o pequeño que sea, lo importante es el acto de recordar a la persona.
Tenga un plan de seguridad
Es posible que tengas reservas a la hora de asistir a una reunión navideña, por lo que debes contar con un plan alternativo. Si no se siente bien estando allí o si simplemente es demasiado, permítase marcharse. Busca una alternativa, aunque sea irte a casa a ver una película.
Pruebe algo nuevo
Imaginar las primeras vacaciones después de una pérdida puede ser difícil. Si te parece demasiado abrumador continuar con las tradiciones navideñas tal y como eran, prueba algo diferente.
- Cancela las vacaciones Si te encuentras en una situación en la que celebrar no es más que pasar por el aro, tómate el año sabático. Puede parecer una locura, pero las vacaciones llegan todos los años y puedes retomarlas cuando estés preparado.
- Cree una nueva tradición. Tómate tu tiempo para pensar en las cosas que te gustan de la fiesta y elimina las que no. No hay una forma correcta o incorrecta de celebrarlas y, lo que es mejor, puedes cambiar de opinión (aunque sea varias veces). Tú decides qué es lo mejor para ti.
Sentir que nunca volverás a disfrutar de las fiestas es natural. Aunque nunca volverán a ser exactamente iguales, la mayoría de la gente descubre que con el tiempo, a medida que se forman nuevas tradiciones, el espíritu festivo empieza a surgir de nuevo. Durante este tiempo es importante recordar que hay que ser amable con uno mismo, no hacer nada que no nos sirva o nos alegre, y darnos tiempo para sentir y expresar nuestros sentimientos.
El dolor no desaparece, aprendemos a crecer en torno a él, así que mantente siempre presente en la pérdida, ya sea durante las fiestas o cualquier día del año. Encontrar sentido a la pérdida es tan individual como lo somos los seres humanos, así que concédete gracia y sigue creciendo en el camino.