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La hija de un cirujano recibe un hígado y estudia medicina
Gracias a su trasplante de hígado, Karishma pasó de ser una niña que apenas podía comer, estaba cansada todo el tiempo y luchaba durante las actividades cotidianas, a ser una adolescente muy activa con un futuro brillante y más vida por delante.
Karishma nació con una enfermedad hepática llamada atresia biliar, razón por la que necesitaba un trasplante. Sabía que en algún momento necesitaría un trasplante de hígado, pero no había garantías sobre el momento en que lo necesitaría. A los 10 años, Karishma empezó a tener dificultades para ir al colegio, estaba cansada todo el tiempo, le costaba comer y tenía mucha ictericia.
"Me inscribieron en la lista de espera en marzo y tuve la suerte de recibir un donante fallecido en mayo. Si no hubiera sido por esa donación, hoy no estaría viva", afirma Karishma. La noche que su familia recibió la llamada, Karishma no lo podía creer. "¿Esto está pasando de verdad? "¿De verdad voy a volver a estar bien?".
La vida después del trasplante
Desde que recibió el trasplante de hígado en 2006, se convirtió en una adolescente muy activa en su colegio, participando en cross country, atletismo, oratoria, debate y muchas otras actividades. También le encanta pasar tiempo con sus amigos cuando no está en el colegio. Su padre, el Dr. Bhargav Mistry, es cirujano de trasplantes en Sanford Fargo.
Karishma piensa a menudo en su donante y en su familia y les ha escrito.
"No puedo imaginarme mi vida si no hubiera recibido un trasplante. El hígado era prácticamente perfecto para mí. Estoy muy agradecida". - Karishma
Karishma Ahora
Después de graduarse de la escuela secundaria, Karishma pasó a completar su licenciatura en ciencias en la Universidad de Minnesota. Después de la graduación, aceptó un trabajo en una empresa de salud en Ohio y trabajó allí durante 2 años antes de comenzar su viaje en la escuela de medicina. Ahora está en su segundo año de medicina y le encanta cada momento. Sigue concienciando sobre la donación de órganos y compartiendo su historia siempre que puede.
Al hablar de su vida actual, dijo: "Tengo la suerte de no haber tenido problemas de salud desde el trasplante y de poder vivir como cualquier persona normal de 25 años. Tengo la suerte de haber recibido un hígado en 2006 y espero seguir compartiendo mi historia a lo largo de mi viaje por la medicina para ayudar a la gente de numerosas maneras."
El deseo de Karishma es que todos los que esperan un trasplante que les salve la vida, lo consigan. Sea un campeón de la esperanza, regístrese en línea para ser donante de órganos, ojos y tejidos.